La hipocresía de Europa respecto a los recientes acontecimientos en Ucrania es doble y notable.
Por un lado, casi la totalidad de los medios de comunicación -probablemente de la sociedad también- jalea (con enfermizo e íntimo regocijo) a esos ucranianos que están luchando y muriendo por un acercamiento Europa pese a que ningún país de la Unión quiere a Ucrania dentro del club. Desde nuestro insufrible complejo de superioridad, sonreímos bobamente al ingenuo europeísmo de la sociedad ucraniana (¡ojo!: sólo parte de esa sociedad) y amenazamos con sanciones a su gobierno, que no olvidemos fue elegido democráticamente, por hacer lo que España no tiene los redaños de hacer: sofocar la ilegítima violencia con legítima violencia.
Por otro lado, nos felicitamos con no menos insufrible autocomplacencia por nuestra condena hacia todo lo que signifique extrema derecha, y alardeamos de nuestros sistemas protectores y garantistas, defensores de minorías oprimidas, pero al mismo tiempo ignoramos, o preferimos ignorar, que estas revueltas en Ucrania están inflamadas precisamente por la extrema derecha, que suponen un nacionalismo radical y que desde hace veinte años esa media Ucrania discrimina y pisotea el derecho natural que el tercio rusófono de su ciudadanía tendría a que su lengua se reconozca igual que el ucraniano: el ruso -quizá muchos lo ignoren- no es lengua oficial en Ucrania pese a ser el idioma materno de diecisiete millones de ellos.
Y así, según aplaudimos el irremediable romanticismo eslavo y abrigamos el inconfesable, morboso deseo de una revolución bañada en sangre, ellos mueren por docenas sobre los gélidos adoquines de sus ciudades, con la temeridad que sólo los eslavos saben mostrar ante la muerte.
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Amen brother. And guess who isn’t going to Ukraine, Mali, or even the next Balkan war? That’s right we stupid Yankees give you the green light to send your money and bodybags. Now if only this idiot community organizer president would put the troops on OUR borders. Good article pablo
I love I can always count on a redneck for a good compliment. :D
Sure, bro: as you can see, not all opinions coming from a Spaniard are forcibly left winged. Hugs!