Muchas rutas tengo ya hechas por Euskal Herria y aún estoy por ver, de Vitoria hacia el sur, algo que no sea castellano; y por eso digo: el hecho de que la llanada alavesa pertenezca al País Vasco y, más aún, que sus municpios se alineen con el anhelo independentista euskaldún, son cosas que causan maravilla.
Hoy visitaré con la moto el muy disputado y polémico Condado de Treviño, que encaja en la serie Vasconia en dos ruedas no por ser vascuence, sino precisamente por no serlo: se trata de un exclave burgalés en Álava, un anacrónico –y también simbólico– último reducto que Castilla se resiste a perder. Invito al lector a que me acompañe en este recorrido.
Una radiante y calurosa mañana del mes de agosto me calo el casco y los guantes, saco a Rosaura del garaje y salgo de Vitoria hacia el suroeste por la A-3102, una bonita y poco transitada carretera que, a los pocos quilómetros, entre frondosos hayedos corona el límite provincial alavés en el puerto de Zaldiarán, desde el que puede puede ya verse una buena parte de este extenso condado (cuya historia ha sido tan sibilinamente reescrita por el Gobierno Vasco para adaptarla a sus intereses expansionistas).
Ya en la provincia de Burgos encuentro en primer lugar, sobre una elevación a la izquierda de la carretera, la idílica aldea de Arrieta, formada por apenas una docena de casas que dormitan bajo el sol del estío en torno a una vieja iglesia. Tomo el desvío y me acerco hasta la plaza; y al apagar el motor me envuelve el silencio, sólo cortado por el canto de una pequeña fuente cuyo débil chorro va llenando el cubo que alguna vecina ha puesto a llenar. Doy una vuelta por el pueblo y veo dos o tres casas con el cartel de se vende. Dan ganas de venirse a vivir a este perdido y agradable rincón del mundo.
Junto a Arrieta está Oroño, aldea que, según la engañosa enciclopedia Auñamendi (un instrumento para la desinformación histórica), sería un lugar alavés; pero lo cierto es que se trata de un lugar burgalés desde hace mil años. Pero así es como reinventan los separatistas la historia para manipular el presente.
Apenas unos quilómetros más al sur, en el centro mismo del condado, se asienta la villa de Treviño sobre la ladera de un monte, mirando hacia el sur y en bella armonía con la tierra. Allá por el año 1000 de nuestra era, esta región ya pagaba tributos al hoy riojano (y entonces navarro) monasterio de San Millán. Se cree que hasta aquí llegaron las aceifas sarracenas, y que donde hoy está el pueblo hubo entonces una oscura población cenobítica.
Hubo también, después, un castillo navarro (hoy desaparecido), en torno al cual, en 1161, fue Treviño fundado por por el rey Sancho VI al otorgarle el fuero de población (semejante al de Logroño). A la nueva villa se le dio el trazado característico de las de esta zona, como Salvatierra, Peñacerrada, Antoñana y muchas otras: tres calles paralelas a lo largo de la falda del monte, conectadas entre sí por cantones y pasadizos.
Según voy explorando las calles, llenas de duras sombras bajo este intenso sol, entro a uno de sus bares para tomar un pincho y un chacolí, mi ritual insoslayable en las rutas vascuences. Las costumbres locales son más alavesas que burgalesas, al estar Treviño tan cerca de Vitoria y rodeado de Álava por todas partes; y por eso se tapea al estilo vascongado y se bebe vino chacolí o de rioja. Desde el s XVII, varias veces la población del condado ha querido incorporar éste a Álava (por razones prácticas y económicas, al ser los tributos forales más bajos que los castellanos), pero Burgos siempre se ha opuesto.
A lo largo de la calle principal encuentro la típica arquitectura de esta tierra, sobria pero elegante. Fachadas de mampostería o de ladrillo, a veces con columnas y soportales.
Una arquitectura más castellana que vasca, como ocurre en toda la llanada alavesa. Para ser justos, hay que admitir que geográfica y culturalmente al Condado de Treviño le correspondería más pertenecer a Álava que no a Burgos (amén de que, como queda dicho, una amplia mayoría de sus habitantes así lo prefiere); pero por esa regla de tres habría antes que admitir que todo el sur de Álava debería pertenecer a Catilla (para lo cual hay sólidas razones históricas), o como mucho a Navarra, pero no a Euskadi.
Ahora bien, ¿en qué se basa el pleito que mantiene Vasconia con Castilla por este condado? Desde hace casi un siglo los vascos vienen aduciendo razones históricas, pero tales razones son falaces: primero porque la villa de Treviño fue fundada por los navarros, no por los vascos; segundo porque sólo cuatro décadas tras dicha fundación Navarra permutó el municipio con otros en manos de Castilla, donde ha permanecido hasta hoy; de modo que Treviño es tierra castellana desde el año 1200 sin solución de continuidad; ocho siglos frente a las cuatro décadas que fue navarro.
Una última razón tiene que ver con el principal argumento que aduce la Diputación de Álava: que en el siglo XV Treviño perteneció a Álava, y en base a ello dicen que quieren reincorporar a Treviño en lugar de anexionárselo. Pero se trata de una inexactitud historica, puesto que Treviño jamás fue alavés. ¿A qué reincorporación se refieren? La única verdad documentada (y reflejada en la propia enciclopedia Auñamendi, pese a su indisimulado sesgo pro-vascuence) es que en 1417 Treviño –siendo a la sazón señorío de los Manrique “por donación pura y perpetua para siempre jamás”— fundó junto con Vitoria y Salvatierra cierta Hermandad de Álava que, si bien fue germen de la futura provincia, no tenía entonces más finalidad que luchar en común contra el bandidaje; hermandad de la cual, además, separóse Treviño unas décadas más tarde sin que se conozcan fecha ni causa ciertas. De manera que difícilmente puede haber reincorporación de Treviño a Álava si nunca hubo incorporación alguna. Lo que los vascos quieren es un expansionismo, sin paliativos.
Mas sigamos con la ruta. Una vez visitada la cabeza del municipio, tomo hacia el este por la carretera que sube valle arriba y llego a otra aldea de curioso nombre: Franco.
No es que se llame así por el dictador, desde luego, pero resulta casi una burla que Álava encierre dentro de sus límites, apenas a un tiro de piedra de la capital autonómica, un lugar con nombre de memoria tan poco grata especialmente para los vascos.
Franco es un lugar diminuto y agradable, apenas un caserío con tres calles, sin un sólo bar donde pueda apagarse la sed; ni falta que a los vecinos les hace, pues allí han de vivir poco menos que en familia; como en familia parece que se apropian y reparten el pórtico de la iglesia para aparcar sus coches a la sombra, no sea que les dé una insolación a las pobres máquinas.
Y desde Franco, junto al cruce de carreteras central del condado, cualquiera de ellas es buena para seguir haciendo una ruta motera. En otros viajes de esta serie he ido hacia Bernedo o Peñacerrada, y en un futuro visitaré Samaniego; pero hoy ya he cumplido con lo que me propuse, que era conocer Treviño y hacer honor a la verdad de su historia, así que completo el círculo regresando por la carretera de Vitoria.
Sólo un detalle me falta por ampliar que pone de manifiesto hasta qué punto el mundo se rige por el dinero, siendo las razones históricas no más que disculpas: cuando en 1646, dos siglos después de haber salido de la Hermandad de Álava, los habitantes del condado quisieron unirse a la provincia que de la hermandad empezó a nacer, fueron los propios señores alaveses quienes pusieron el veto, objetando que, al estar sus municipios exentos de pagar gabela a Castilla y el de Treviño sujeto, caso de admitirlo en Álava podría querer la Corona tomar precedente y extender el tributo al resto; y por eso, a fin de aceptarlos, pusieron a los solicitantes la condición de, primero, obtener del rey exención del temido impuesto; mas, como quiera que Castilla no les concediera esta merced, Álava no aceptó al Condado de Treviño en su seno.
Hacer politica sobre dos ruedas es lo que me faltaba por ver, aunque claro queda que todo es posible.
Disfruta de la moto, de los paisajes, y de las gentes que encuentres a tu paso, y trata de apartar tus evidentes obsesiones politicas.
Aquí habló uno cuya obsesión política no le permite disfrutar de la lectura. Consejos vendo que para mí no tengo.
Pobres treviñeses, con actitudes como la tuya su voluntad nunca sera tenida en cuenta. Ya que pasaste por allí podías haber preguntado a los habitantes y nos contabas sus impresiones y anhelos, aunque me da la sensación que simplemente tu ya tenias tu idea preconcebida y no era cuestión que ellos te la desmontaran y tuvieras que modificar tu prejuicio.
Otro que tal. Nunca falta algún adoctrinado a quien la historia le estorba.
Los prejuicios no son mayor problema. Lo malo es creer, como Vd, que se carece de ellos.
hola muy bien muy veraz y bien documentado todo pero tendria que puntualizar
veras soy de treviño mi madre de doroño esas fotos no son de doroño ya ves si no de arrieta ..que nombre mas castellano leones por cierto y supongo que desde vitoria pasarias por el puerto de zaldiaran ..nombre muy castellano tambien por cierto
te darias cuenta que estos malvados vascongados tienen todo este heroico condado que se les resiste llenito de nombres en bilingue en castellano y esa lengua barbara que hablan ellos mecachis la mar
por cierto no viste ese letrero que habia en el ayuntamiento ? ese que ponia de burgos en contra de a voluntad de los treviñeses?
ochate imiruri albaina zurbitu ascarza arrieta y muchos pueblos mas de fuerte origen castellano
hacer honor a la verdad de treviño ? me suena a comete la sopa o te acuestas caliente
no me malinterpretes ojo solo que pasarse la historia y la voluntad de casi el cien por cien de sus habitantes asi como papel higienico…..
jo te pondria hasta en contacto con un historiador de la zona pero me parece que harias mejores migas con algun concejal del pp de treviño que por cierto ni nacieron ni viven en treviño pero bueno
en cambio si le preguntas al alcalde la cosa cambia mira y no es una cosa de dinero pero bueno estamos abducidos por los malvados castellanos
por cierto cuando cambiaste de “provincia” no notaste un cambio de la calidad de las carreteras
y si franco no se llama asi por el colega y si se lo insinuas a algun lugareño igual llegas al destino sin la moto del zarruegazo que te dan …..abducidos por vascos ya sabes huy perdon vascongados
mas cosas los navarros no son vascos y que mas burradas …mira sabes que
te invito a volver
mira las cuevas de las gobas en laño la joyita romanica de san vicentejo el pueblo fantasma de ochate la ermita de san formerio la puebla de arganzon nuestros hayedos roblerades y sobre todo habla con nosotros del tema sin miedo y escuchanos
antes de faltarnos el repeto a todos los treviñeses como has echo con una ignorancia mantenida desde la politica y no desde la razon
y por ultimo los que como tu aun añoran aquellos de mano en alto y cara al sol que los hay
en 1938 en 1958 se presentaron sendas peticiones de los ayuntamientos del condado para pasar a ser alava
esa gente rancia que hay poca pero hay no quieren ser vascos o vascongados como te sea comodo
QUIEREN SER ALAVESES
por cierto me disculpo si te asigne alguna filiacion politica pero ya sabes en estos tiempos que corren o todos moros o todos cristianos
yo seria segun los topicos un malvado vasco abducido sin ver las virtudes de la corona castellana ….y sigo sin verlas la verdad
eres andaluz haaaaay cuantos topicos y prejuicios se te podria aplicar verdad? pues no por que tengo amigos alla y procuro escucharles preguntarles y esas cosas antes de pasearme por andalucia y escribir la primera burrada que se me ocurra
si te sirve de consuelo burgaleses alaveses o de la ciudad autonoma de ceuta seguiriamos siendo españoles no?
digo
bueno disfruta de tu viaje y menos adoctrinamiento menos wiki y mas hablar con la gente hombre que se aprenden cosas
agur …..perdon Et ego servabo te Deus regem Castiliae
En primer lugar, y ya que habla Vd. de respeto, no me tutee. Gracias.
Lamento que su madre lo mandara caliente a la cama si no se tomaba la sopa, pero así son los castellanos viejos; gente ruda y noblota.
Pero antes de meterse a escribir en español, convendría que lo aprendiese Vd., porque no sólo no sabe escribirlo, como es evidente, sino que ni siquiera sabe leerlo. Vamos, que es Vd. ágrafo. De lo cual no lo culpo, esté tranquilo. Es lo que ocurre cuando en la escuela se dedican a mentirles acerca de la historia en lugar de educarlos. Una pena, porque si supiera Vd. leer, se habría dado cuenta de que yo no he dicho que los navarros sean vascos. Aunque, en realidad, sí lo son; de hecho, ellos son los originarios vascones, y ocupaban el territorio que luego se llamó Navarra. Al extenderse hacia el oeste vasconi-zaron la región que luego se llamó Vascongadas. Pregunte, pregunte a su amigo el historiador “de la zona”.
También, si supiera leer, habría visto que yo mismo admito que Treviño es burgalés pese a sus habitantes; y eso que no he nacido allí ni he tomado chacolís con su alcalde. Fíjese lo que son las cosas y todo lo que puede aprenderse leyendo y viajando, aun manteniéndose alejado de adoctrinados.
Ya he corregido el error que Vd. me indica respecto a Arrieta. Disculpe que no se lo agradezca, pero sólo agradezco lo que me corrigen de buena fe.
Y si, junto a unas clases de español, le hubieran enseñado álgebra y lógica elemental, comprendería que la existencia de antiguos topónimos vascuences en Treviño (que es el argumento estrella de su deshilvanada perorata) no contradice ni desvirtúa el hecho fundamental que afirmo: que el condado de Treviño es castellano desde hace casi mil años y no hay argumento histórico para justificar que deje de serlo; como castellano es Vd. mismo por mucho que se haga llamar Natxo, y también sus ascendientes, entre los cuales, ya que saca Vd. el original comodín de Franco y el Cara al sol, seguro que había unos cuantos franquistas. Quizá no debería Vd. avergonzarse tanto de ellos, aunque comprendo que lo hayan adiestrado para renegar de los suyos.
Por lo demás, no necesito su invitación para volver a Burgos, que me pertenece tanto como a Vd. Pero hágase mirar eso de invitar a la gente para que vaya “sin miedo” a que luego le arreen un “zarruegazo” (esto debe de ser vascuence antiguo) por no tener lavado el cerebro o por contar verdades históricas que tanto parecen ofenderlo. Soy un tipo pacífico y no me gustaría tener que sacudir a nadie. Ahora bien: comprenda que no me pare a hablar y escuchar a los de su calaña, pero sus propias palabras ya delatan su idea de una conversación amistosa. Además, si habla Vd. el castellano igual que lo lee o lo escribe, iba a ser un diálogo de sordos.
¡Ea!, a seguir bien, majete, y haga caso a su propio consejo: no se meta en política, hable con su concejal del PP y ejercite la razón.
touche
me ha vd vencido y convencido
culpa mía por discutir con vd
me llevo a su terreno y me venció
tenga vd larga vida y prosperidad
El único adoctrinado que veo aquí eres tu, Trebiñu Araba da.
Eso es porque tus amos no te han quitado las anteojeras.
Álava es Castilla.